Si tu deporte favorito es el billar y estás pensando en comprarte una mesa de billar para poder practicar cada día o poder compartir buenos momentos con tus amigos sin tener que ir a un bar o a un local, este artículo te interesa.
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Mesas de billar: qué tener en cuenta
En primer lugar, si no estás familiarizado con el término, cuando se habla de mesas de billar se hace referencia al mueble o la superficie de forma rectangular donde se practica dicho deporte. Generalmente, es de madera o pizarra y está recubierta con una tela con unas esquinas que están reforzadas con caucho y que tienen 6 agujeros en los cuales se van a introducir las bolas.
Como era de esperar, existen muchos tipos de mesas, en función de la modalidad de billar a la que se quiera jugar. Entre ellas destacan el billar francés, inglés, americano, también las hay automáticas, las que tienen monedero, las fijas o las plegables, entre muchas otras.
Por eso, antes de comprar una mesa de este tipo es importante tener claro qué mesa se está buscando. Es importante que, como ya hemos dicho, la mesa sea rectangular, lisa y esté recubierta con un paño que, tradicionalmente, es verde, pero recientemente ya las hacen con otros colores. Si la mesa tiene algún pliegue o protuberancia, no será válida para jugar.
Características
Es importante evaluar las bandas elásticas de los lados y ver que, efectivamente, estas permiten el rebote y no influyen en la trayectoria de la bola. A partir de ahí, ya se puede elegir el tipo de mesa de billar que más se ajuste a las necesidades. A nivel general, existen las siguientes:
- Mesa de billar francés o de carambola. No tienen troneras o agujeros y el marco suele ser de madera y con unas marcas de referencia, ya que son específicas para practicar la técnica de la carambola o el billar francés.
- Mesa de billar americano o de billar pool. En este caso, tienen 6 troneras en las que se debe introducir la bola. Suelen ser verde o azul y con bordes metálicos. A diferencia de otras, los agujeros son más grandes.
- Mesas de snooker o billar inglés. Son más grandes que la de pool, pero con los agujeros más pequeños. Por eso, se dice que es la mesa para practicar un billar con mayor dificultad.
- Mesas automáticas. Las troneras tienen un sistema de retorno automático. De este modo, cuando la bola entra, sale de forma automática por la ranura de salida, sin tener que hacerlo manualmente.
- Mesas con monedero. Como en las automáticas, el sistema funciona por sí solo, pero, en este caso, se debe introducir antes una moneda para accionar la palanca y, así, que las bolas salgan para poder jugar. Son las más frecuentes en los salones recreativos o bares.
Con estos consejos se puede tener una idea de qué mesas de billar existen y cuál es la mejor en función del tipo de juego y objetivos que se persigan.